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domingo, 21 de junio de 2015

"Callejeros Viajeros":isla Célebes 1800

Isla de Célebes 1800, mapa D. Rumsey

La isla de Célebes, situada en el continente asiático, es una isla constituida por cuatro penínsulas, lo que le da una forma curiosa, similar a un aspa.

Macasar era una de las ciudades más grandes del sudeste asiático y  que por su situación estratégica (rodeada por Filipinas, Molucas, Timor y Java) hacía de su puerto un lugar importante para el comercio de especias.

Estaba controlada comercialmente por los holandeses, (Compañía Holandesa de las Indias) que importaban a la isla opio, aguardiente, telas y quinquillería, tomando de retorno arroz, cera, especias y esclavos.

En toda la isla , su clima de aire abrasador en algunas épocas del año,era templado por sus frecuentes lluvias y brisas periódicas.

El terreno de Célebes era, principalmente en su territorio central, de relieve montañoso, que unido a sus acantilados y junglas dificultaba su comunicación interior, aunque producía en el viajero una sensación de naturaleza exuberante y desconocida.

 La fertilidad de la isla se encontraba en la abundancia de cocos, bananos, melones y naranjos. El arroz y el algodón eran producciones de importancia en todo el comercio internacional.

Sus habitantes, eran originarios de diversas etnias y estaban considerados hacia 1800, como  “inquietos y belicosos”, estando gobernados por numerosos reyes nativos. La minería y especialmente la búsqueda de oro era una de las más frecuentes actividades entre muchos de sus habitantes.

Se encontraban en todo el vasto territorio animales para la caza, mientras que sus ríos y lagos contenían sabrosos peces.

Esta isla de extraordinaria belleza para el buceo, es también hoy en día muy conocida porque comercializa un tipo de madera (ébano de Macasar) escasa y cara que es muy preciada por los japoneses para los muebles.






domingo, 7 de junio de 2015

Bando contra la embriaguez

Bota de vino (detalle bodegón de Meléndez)
"No puedo menos de ver con el mayor dolor, que el exceso en la bebida por algunos individuos de la plebe los conduce a delitos, que no cometerían si no se privasen del uso de sus potencias, obligando a la Justicia a aplicarles los castigos legales que corresponden…

…Se me avisan los sucesos que suelen ocurrir en esta referida Capital, procedidos comúnmente de la embriaguez, y obrando conforme a mi carácter, inclinado con preferencia a la benignidad, he resuelto aplicar algunas penas de pura corrección a los que después de publicarlas incurran aún en tan detestable vicio.

A consecuencia declaro: que a todo hombre que se halle tirado en el suelo sin poderse ir por si solo a su casa, y al que aún pudiendo hacerlo esté formando escándalo por efecto de su embriaguez, bien sea con provocaciones de obra, palabra o ademanes; o con proposiciones mal sonantes, se le corregirá por la primera vez con ocho días de obras públicas, quince por la segunda, treinta por la terceras, y si, contra lo que debo esperar, incurriere alguno en la cuarta, trocándosele entonces como ebrio consuetudinario e incorregible, se le formará sumaria información de su vida y costumbres y aplicará la pena según sus resultas con arreglo a las leyes y disposiciones respectivas.

A las mujeres que, olvidadas del natural pudor de su sexo, se encontraren ebrias en los términos expresados, se impondrán en cada vez hasta la tercera tantos días de cárcel cuantos deben sufrir los hombres en obras pública, esto es ocho por la primera, quince por la segunda y treinta por la tercera, sirviendo además en la misma cárcel los destinos a que las aplique el alcaide y a la cuarta se les formará sumaria legal de vida y costumbres para su castigo.

Los hombres que por su ocupación, empleo o nacimiento no se pudieren aplicar a las obras públicas, sufrirán la propia corrección de cárcel impuestas a las mujeres, añadiéndoles tres días de bartolina (prisión) en la primera vez, seis en la segunda. Los mismos en la tercera y en la cuarta se les formarán también sumaria para la resolución que fuese de justicia.

Portada Gazeta de México 1800
Por tanto mando que, para que llegue a noticia de todos, se publique por Bando en esta capital, fijándose ejemplares en los parajes acostumbrados y en todos los cuarteles menores, a cuyo fin y para los demás efectos que corresponden se remitirán los necesarios a los tribunales y jueces que deben celar y vigilar su puntual observancia.

Y con la mira de que tan útiles y saludables providencias…extenderla al distrito del Virreinato con el importante fin de que en todas partes se destierre hasta lo posible el abominable vicio de la embriaguez".

Gazeta de México 1800