En estas fechas que han comenzado o están comenzando los estudios académicos, os propongo pararnos en una nota que aparecía en primera página de un diario nacional en el año 1800, que explicaba un examen público para alumnos de primeras letras, que se había desarrollado en la Villa de Galapagar.
¡Cuánto han cambiado los contenidos y procedimientos para los exámenes!
Portada Catecismo de 1800 |
"En 3 de junio del presente año, don Felipe Ventura, maestro de primeras letras, con aprobación del Real Consejo de Castilla, en la Villa de Galapagar, de este Arzobispado, deseando dar al público, y a los vecinos de ella, una prueba del esmero y cuidado que tiene con los niños de su obligación, y los que confían a su cuidado,
celebró examen público, en su aula escuela, con anuencia y presencia de los Señores de Justicia, Clero, y principales vecinos de ella, de varios facultativos de la Corte, Escorial y Pueblos inmediatos, otras personas de distinción que concurrieron al acto,
en el cual 16 niños y 6 niñas, explicaron con mucha claridad las reglas de leer, escribir y contar, leyeron en voz alta indistintamente los capítulos de sus respectivos libros, que por suerte les salieron, exhibieron sus respectivas plantas, se preguntaron unos a otros los misterios de la misa, explicando la representación de cada uno, dijeron de memoria los capítulos de la Historia sagrada del Abad de Fleuri, como también los catecismos de Ripalda y Astete, con varias preguntas de buena educación, temor a Dios, veneración al rey y sus ministros, como asimismo, las cosas más necesarias, que necesita el cristiano para salvarse. A esto sobresalió un niño de 5 años a quie se le abrió un breviario y leyó perfectamente en latín.
Todos los concurrentes, manifestaron el justo júbilo del adelantamiento de los niños, y la aprobación de sus trabajos, dieron gracias la maestro y le persuadieron continuase sus fatigas, en la comisión de su empleo. Madrid y junio 14 de 1800."