Semanario de Agricultura y Artes, julio 1800 |
En la entrada de hoy veremos una instructiva noticia sobre el girasol, que en algunos aspectos poco tiene que ver con lo que pasa hoy en día, aunque no por ello resulta menos curiosa.
Un artículo publicado en el “Semanario de Agricultura y Artes dirigido a los párrocos”, de julio de 1800, mostraba unas “observaciones útiles” en relación a una memoria sobre el cultivo de girasol, presentada unos años antes en París (capital de la modernidad).
En dicha publicación se ponía de manifiesto el escaso conocimiento sobre su utilidad y por lo tanto, la reducida práctica en el cultivo de esta planta herbácea. Pero a la vez, también demostraba el interés en publicar todos aquellos ensayos y descubrimientos que se iban sucediendo.
“Me costó no poca dificultad el conseguir una corta cantidad de semilla de girasol porque en mi país (Francia) no se le cultiva, y solo se encuentra en algunos jardines tal cual pie de que se hace muy poco caso".
"La grana…quieren que se la destine para sacar partido de ella aceite. No tiene duda que lo da muy bueno y acaso el mejor después del de olivas, pero es en tan corta cantidad, que no resultaría utilidad alguna del cultivo del girasol si se ejecutase con este objeto".
"Mis experimentos y los de algunos otros cosecheros inteligentes harán abandonar toda nueva tentativa que se quiera hacer sobre este punto. Así no dudo que haya tenido muy mal éxito la empresa que formaron en 1772 unos comerciantes de Viena, de emplear las tierras eriales en el cultivo del girasol para sacar aceite".
"Las semillas del girasol…, son muy apreciables para el sustento de los animales, y aún parece que no sería un alimento despreciable para los hombres, porque son nutritivas y tienen un sabor agradable, algo parecido al de avellana".
"Si hemos de creer a algunos autores, los indios las comen, y aún en la Virginia se sirven de ellas para hacer pan y papilla para los niños; sobre lo cual me propongo hacer algunos ensayos. Son muy buenas para el ganado lanar, de cerda, y de las demás especies".
"Con solo alimentar mis gallinas con semilla de girasol he conseguido que me hayan dado huevos con abundancia maravillosa. Este descubrimiento…ha llamado de tal modo la atención de mis vecinos, que les veo ya sembrar girasoles a fin de conseguir abundancia de huevos en una estación en que siempre escasean".
"Por último, la facilidad del cultivo, la abundancia del producto y el uso variado e interesante que se puede hacer de las cosechas, hacen del girasol un nuevo manantial de riquezas para la agricultura.”
Hoy en día la superficie cultivada de girasol, sólo en España, está alrededor de 800.000 hectáreas, consiguiéndose una abundante producción de aceite de girasol, tan común hoy en día. También a nivel mundial es destacable el uso de las semillas de girasol para la elaboración de biodiesel, o como no, el uso de las semillas para algo más placentero como ver una buena película comiendo unas pipas tostadas y saladas.